viernes, 17 de agosto de 2012

Rebelión en la Granja


Rebelión en la granja empieza con el muy borracho Sr. Jones, dueño de Manor Farm, haciendo un mal trabajo en la administración de la granja. Los animales desatendidos escuchan a un cerdo viejo y sabio, Major, que los anima a revelarse y manejar la granja ellos mismos. Sobre todo, dice, todos deben ser iguales. Luego muere. Todos están emocionados menos Benjamin, un burro cínico cuyo papel principal en la vida es ser cínico.

Los animales se revelan y los cerdos, como son los animales más inteligentes, desempeñan el papel de los líderes. (¿Qué pasó a todo eso de la igualdad?) Hay un conflicto inmediato entre dos cerdos, Napoleon y Snowball. Napoleon quiere hacerse cargo de todo mientras que Snowball quiere enseñar a los otros animales y construir un molino de viento. Napoleon emplea nueve perros feroces y enormes, que robó cuando eran cachorros, para hacerse el Jefe Supremo y Todopoderoso. No se hace llamar así pero eso es lo que piensa de el mismo. Se aleja de Snowball, lo cual hace que sea fácil echarle la culpa para todo.

Los cerdos se aprovechan de los otros animales y rompen todas las reglas que hicieron después del la Rebelión. Todo se destruye – la vida en la granja cada día empeora más, los animales se olvidan del sueño original de Major y los cerdos toman malas decisiones en cuanto a sus relaciones con las granjas vecinas. El momento más bajo es cuando los cerdos mandan a Boxer, un caballo leal y trabajador que está listo para retirarse, a su muerte.

En resumen, los cerdos empiezan a parecerse mucho a los horribles dueños humanos con quienes empezamos. Talvez aun peores. Benjamin, el viejo burro cínico, tenía razón.

Cuando lei este libro realmente no me gusto para nada. 
Despues de unos años volvi a leerlo y confirmo que no es mi gusto. Los personajes son complejos si, pero no ricos. Los personajes creen ser mejores que los humanos y terminan haciendo lo mismo. El comunismo no es un tema que me guste profundizar. 
Al que le guste adelante, y despues cuentenme que les perecio.

Mi planta de naranja lima, José Mauro de Vasconcelos



  El protagonista de esta elogiada obra es Zezé, un brasileño de origen indígena perteneciente a una familia humilde que, cada vez que recibía un castigo, se desahogaba frente a su planta de naranja lima, un arbusto que se diferenciaba de todos los demás por tener la capacidad de hablar.Al principio, producto de su corta edad, este entrañable e inteligente personaje, quien parece no estar afectado por el maltrato familiar y sus duras condiciones de vida, posee un universo propio repleto de juegos y sueños. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo y su cruel realidad se hace más evidente, deja de lado ese mundo de fantasía lleno de travesuras, aprendizajes y deseos, y toma conciencia de lo difícil que puede llegar a ser la vida de un niño pobre. A raíz de ello, su universo dejará, antes de tiempo, de tener características infantiles y se transformará en un espacio marcado por el dolor, el sufrimiento y la violencia.“Mi planta de naranja lima” es, en definitiva, un libro que, a través de una historia dramática y conmovedora, invita al lector a reflexionar sobre la necesidad de contener y demostrar afecto hacia los niños, y a tomar conciencia acerca de la importancia de dejar de lado las problemáticas propias del mundo adulto para, de esta forma, garantizar la infancia.


Cuando lei este libro tenia 14 años, y nunca me voy a olvidar de esta historia. La lei para un trabajo del colegio y recuerdo que me emocione al conocer al protagonista y su particular amigo. Fue uno de los primeros libros que me iniciaron en la literatura.  

       Recomiendo este libro, si tienen hijos que les guste leer, esta historia no los va a defraudar. 
Muestra la cruda realidad de ser pobre en una favela y la importancia de la amistad.   Espero que les guste tanto como a mi me gusto.